KUSIKUY: LO QUE TE PREGUNTABAS SOBRE LA NUEVA APP QUE APOYA LA COMPRA DIRECTA AL PRODUCTOR

Guadalupe Benavente Escobar, parte del programa del Sistema Importante de Patrimonio Agrícola Mundial (Sipam) de Profonampe, recuerda claramente el viaje que hizo a Unmapata, a cuatro horas del distrito de Lares en plena pandemia para entregar en mano el dinero obtenido de las primeras ventas del proyecto. “Las familias de la comunidad estaban muy contentas y nos contaban que era la primera vez que hacían trato directo con un cliente, porque normalmente iban los acopiadores y ahí ellos perdían mucho”. Esta vez sus productos estaban yendo directo a la mesa de los cusqueños y Kusikuy, el nuevo aplicativo que permite que más peruanos accedan a los cultivos de más de 500 familias agricultoras, comenzaba a gestar su futuro.

Kusikuy es un aplicativo que pretende acercar a los agricultores a más ciudades sin intervención de intermediarios. Es el resultado de un trabajo conjunto entre el Ministerio del Ambiente, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y Profonanpe, el fondo ambiental privado del Perú, con el financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial mediante su Proyecto GEF Agrobiodiversidad Sipam en alianza con la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec).

¿Cómo eligieron a los productores que participan en la aplicación Kusikuy? El Proyecto GEF Agrobiodiversidad Sipam (AgroBio) realiza sus actividades en las regiones de Cusco, Apurímac, Puno y Huancavelica. Además, está presente en Caravelí, en Arequipa, pero con conservación y reforestación. Los beneficiaros, los que participan directamente, son asociaciones de pequeños productores que viven en estas zonas y en estas regiones. De manera voluntaria han elegido trabajar y vender sus productos mediante de AgroBio, aprobando un reglamento de uso de la marca.

¿Como nace AgroBio? Inicia sus actividades en 2019 y en 2020, en marzo, con la llegada de la pandemia muchas familias de Cusco, que es donde tenemos la sede, se vieron afectadas porque no tenían cómo sacar sus productos a los mercados o a las ferias. Sus cultivos provenían de la agricultura familiar, no de grandes extensiones, pero les sirve para autoconsumo y solventar sus gastos. Las ferias se suspendieron y las carreteras se bloquearon. El proyecto tenía dentro de su estructura un componente de desarrollo de mercado, que ya se estaba trabajando pero que también se vio paralizado, entonces se lanzó una iniciativa para poder ofrecer estos productos que estaban en la zona de Lares, en Cusco, a la ciudad. El piloto arranca ahí. Contratamos a una persona que nos ayude a ver cómo manejábamos el tema de redes y cómo conectábamos a los productores interesados en sacar sus productos de Lares.

¿Cómo se gestionó el tema del transporte en plena pandemia? La municipalidad distrital de Lares aceptó unirse en un convenio con el proyecto mediante el cual asumía una parte del costo del transporte. Así se comenzaron a empadronar a los agricultores y desde el Cusco nos encargábamos de hacer la venta por delivery con una cuenta de Instagram y una de Facebook bajo el nombre de AgroBios Sipam. El personal de la municipalidad acopiaba los productos en las comunidades y enviaban todo empaquetado y con nombre de destinatario. Junto con mi compañera Rosario Valer hacíamos el delivery en pandemia puerta a puerta, con mascarillas y los equipos de seguridad; y luego viajábamos a Lares para entregar el dinero de las ventas, porque se llevaba un control en registros de cuánto mandaba un productor y cuánto se le estaba entregando.

En mayo de 2021 se firmó un convenio con Aspec, hizo los estudios, viajó a las zonas e hizo una pequeña investigación. Se le puso el nombre a la iniciativa y a las ferias que ya existían y se vieron imposibilitadas de seguir por pandemia. Espacios donde los mismos productores vendía sus productos y donde el tema educación estuviese involucrado, porque era necesario que las familias sepan cuáles son los productos de la biodiversidad. Contar de dónde y cómo se cultivaban, como se mantenía la cultura y los rituales, los conocimientos ancestrales.

¿Cómo funciona la logística y la distribución? En cada región tenemos colegas, facilitadores regionales, el mismo proyecto ha contratado asesores comerciales que trabajan directamente con las asociaciones de productores y son ellos los que van reportando la oferta de productos que van teniendo según la época. Son productos que tienen temporalidad.

¿Cuánto es el margen de venta para los productores? El precio que se ve en el aplicativo y que paga el consumido es todo para ellos, nosotros lo único que hacemos es incluir el transporte, porque hay que enviar los productos empacados, en este caso, hasta la ciudad de Lima.

¿Y esto incluye el tema logístico del mantenimiento de la aplicación? El convenio con Aspec lo incluye. El día del lanzamiento hemos tenido alrededor de 3000 descargas del aplicativo en la ciudad de Lima y ha colapsado. Luego ya nos regularizamos, pero el stock se había consumido ya en un 60%.

¿Tienen planes de expansión? El lanzamiento oficial ha sido en la ciudad de Lima y posteriormente se proyecta incluir más ciudades, al igual que las ferias Kusikuy que arrancaron desde el año pasado, en octubre en Miraflores. Hemos hecho ya cinco ferias. Nuestra feria actual va hasta 25 de junio en Cusco, por las festividades. Son cerca de 700 productores de 30 asociaciones y aproximadamente 500 familias de agricultores conservacionistas que están siendo beneficiadas.

¿Cómo podemos descargar el aplicativo? ¿Está disponible para todas plataformas? El aplicativo está disponible ahorita en el Play Store para Android y App Store para iOS: buscas Kusikuy y allí le pones descargar y el aplicativo baja. Pueden ver entonces la infinidad de productos de oferta con sus precios y también sus características.

Etiquetas: kisikuy, app, día del campesino, agricultor, venta directa, entrevista, aplicativo, biodiversidad, cocina peruana