¿CÓMO ATACAR EL SANCOCHADO DEL SHERATON CON ÉXITO?
El sancochado del Sheraton no pasa de moda. Este año vuelve al ataque y nosotros también. Les dejamos nuestra técnica para abordarlo con éxito.
El sancochado del Sheraton no pasa de moda. Este año vuelve al ataque y nosotros también. Les dejamos nuestra técnica para abordarlo con éxito.
Escribe Paola Miglio (Twitter @paolamiglio / Instagram @paola.miglio)
Más de 40 salsas, de 15 cortes de carne, de 25 tipos de vegetales. Sabrosos caldos y consomés, frutas para bajar el empacho y 40 macerados de pisco para terminarla… el sancochado del Hotel Sheraton es uno de los más contundentes y deliciosos de Lima. ¿Cómo enfrentarse a tremendo reto?
No soy buena para los buffets. Debo confesarlo. Como con los ojos y quiero todo en mi plato. Me atraen los colores, las formas, los aromas. Al final, me lleno con el primer intento y ya no puedo parar a servirme más. Por eso, atacar el sancochado del Hotel Sheraton, con sus cuatro años de experiencia y cientos de posibilidades, fue todo un reto. Así que lo primero que hice, luego de dar una vuelta para tomar fotos, fue preguntarle al chef y creador, José Montes, “¿cómo hago?”. La respuesta, enfática, fue “comenzar por las carnes”. Y sí, hay algo de lógica en eso: llenarse primero con los caldos, tubérculos o las ensaladas no permitirá después disfrutar de tanta belleza suave y delicada. Las carnes de este sancochado incluyen más de 15 cortes, y entre ellos, cordero, pollo, chancho, res y embutidos. Sí, unas salchichas blancas cocidas en caldo y un chorizo picante bastante intenso y sabroso.
Nuestra elección fue orientada por Montes. Nos dijo que el rabo era su favorito, y hacia él fuimos, directamente. Se deshacía en sus jugos, así como el cogote, que me encantó, y la lengua casi dulce y el pecho que no podíamos dejar atrás. Para acompañar, solo media papa sancochada, unas breves hojas de col y algo de zarandajas, una mis legumbres favoritas. La hora de las salsas llegó a ser otra complicación. En este caso, sin pena ni reparo, traté de probar de todo un poco. La huancaína con trozos de queso fresco molido, la de berenjenas, una tártara de coco que me sacó de cuadro y quedó para comerla con el chorizo picante, y la mayonesa con choclito molido. Hay, por supuesto huacatay, ocopa, golf y hasta hummus. Y es que dice José que incluye salsas de acuerdo al gusto de sus clientes, y que con unas chuletitas de cordero (que obvio, hay en el buffet), el hummus es la bomba. Esta vez la hice con plato y medio (el medio fue solo embutidos) y cerré con un corto consomé levantamuertos, perfecto para continuar la tarde y no caer tentada por una siesta. Un dato extra: hay tripulina y caldo de cabeza para los más osados.
Hora de limpiar el paladar, tiempo de postres. A ver, la mesa es amplia y nutrida con los mejores representantes de nuestro recetario popular. Esos dulces de olla de antaño que tanto nos gustan. El punto final de esta experiencia fueron unos lychees en almíbar y un buen espresso. Salí del buffet satisfecha y sin remordimientos. Pensando pronto en volver y atacar lo mismo, quizá más. Ah, es importante que el desayuno en su mañana de sancochado sea ligero, para aprovechar mejor la experiencia.
DATO
El buffet del sancochado del Hotel Sheraton va todo setiembre los martes, miércoles y jueves y vale S/. 94 por persona. Pueden repetir las veces que quieran.
Eduard Xatruch, Oriol Castro y Mateu Casañas fueron en su momento jefes de cocina del mítico restaurante El Bulli de Ferrán Adría.
Leer másExiste un premio adicional en el cual podemos votar: el Fine Dining Lovers Food for Thought Award, así que todos a apoyar a Luis. Hay tiempo hasta el 19 de enero.
Leer másLe pedimos consejo a uno de los Three Monkeys sobre sus lugares favoritos para comer en la ciudad imperial y nos dio de todo: desde picanterías, pasando por postres e infusiones hasta cervezas.
Leer más